martes, 30 de noviembre de 2010

MIS CLÁSICOS. George Harrison.


GEORGE HARRISON.
1979.




Cuando escuché All things must past, quedé impresionado de la capacidad de Harrison como compositor de canciones, el bajo perfil que mostraba en los Beatles, detrás de Lennon y McCartney, no permitía apreciar esta habilidad, el álbum triple, primero de Harrison después de la separación del grupo, se convirtió de inmediato en uno de mis favoritos desde entonces y hasta el día de hoy.


Después, pasaron los años y los discos de mi Beatle favorito y yo no les puse atención, estaba ocupado explorando otras manifestaciones musicales vastas y apasionantes, hasta que decidí volver a tener un disco del olvidado, este fue el elegido, que en ese tiempo, era la más reciente producción de George Harrison y se llamaba así justamente.

La primera sorpresa que recibí, fue descubrir que el tono solemne, hasta cierto grado triste de las canciones que había escuchado antes aparecía muy poco y en esta grabación, había piezas más festivas, menos cargadas a la solemnidad religiosa y más dedicadas a celebrar la vida.
Poco a poco fui develando, canción por canción, la obra completa y gradualmente me fueron gustando, cada día más todas y cada una de las canciones, hasta llegar al momento en que todo el álbum, nota por nota, me resultaba sumamente placentero, mis primeras favoritas fueron Blow Away y Soft touch, después Love Comes to Everyone y Here Comes the Moon, que es como la hermana de Here Comes the Sun, grabada con Beatles.

En el disco no hay nada de experimentos novedosos, nada de estructuras intrincadas ni sonidos que no hubieramos escuchado antes, sólo sencillas, sentidas y hermosas canciones como las que supo hacer siempre el Beatle solitario.
En el video, la canción del álbum que de inmediato llamó mi atención, Blow Away, canción de amor del Beatle amoroso, quien murió creyendo en este sentimiento, como en el deseo de Cat Stevens: Quizas algún día pudieramos morir enamorados.* que Harrison llevó a cabo al pie de la letra.

*
En Foreigner Suite, de 1973.






lunes, 29 de noviembre de 2010

CANCIONES FAVORITAS. The Inner Light.


THE INNER LIGHT.
George Harrison.


The Inner Light fue el primer sencillo de The Beatles con una canción de George Harrison, quien se había interesado en la religión y la música hindúes, intereses que están claramente reflejados en la estructura de la canción, la utilización de instrumentos musicales de la India y en el texto mismo, que fue tomado del Dao De Jing, que es el texto principal de la religión daoísta.

Para este redactor, es la mejor canción, no de Harrison con The Beatles, sino de todas las que grabó el cuarteto, por encima de las más geniales piezas de Lennon y McCartney, tiene una melodía sencilla y hasta cierto punto triste, pero también muy bella y la inclusión de la sítara, como instrumento principal, le dan un toque que emociona y por si fuera poco, siento que cuando Harrison "el Beatle místico", cantaba este tipo de canciones, estaba iluminado de algún modo, por esa religiosidad que le permitía sentirse en presencia de algo divino.

La canción apareció después, en edición de CD, en el "Past Masters Volume Two", que es una de las dos recopilaciones de los sencillos de los Beatles, puestas a la venta en este formato.


La Luz Interior


Sin cruzar mi puerta
puedo conocer todas las cosas de la tierra

sin asomarme a la ventana
podría conocer las sendas del cielo
más lejos viaja uno,

menos conoce,
menos conoce.

Sin cruzar tu puerta

puedes conocer todas las cosas de la tierra

sin asomarte a la ventana

puedes conocer las sendas del cielo

más lejos viaja uno,

menos conoce,
menos conoce.


Llega sin viajar,

velo todo sin mirar.

míralo todo sin ver.

Traducción tomada de: "Los Beatles, Canciones Ilustradas" de Alan Aldridge, Emecé Editores, Buenos Aires 1998.

The Inner Light


Without going out of my door
I can know all things of earth
With out looking out of my window

I could know the ways of heaven .
The farther one travels
The less one knows

The less one knows
.

Without going out of my door
.
You can know all things of earth

Without looking out of my window

You could know the ways of heaven

The farther one travels
.
The less one knows

The less one knows
.

Arrive without travelling

See all without looking

See all without doing.






jueves, 25 de noviembre de 2010

martes, 23 de noviembre de 2010

LOS ESPERADOS. Lord Sutch.


LORD SUTCH AND HEAVY FRIENDS.
1970.




A principios de los setentas, este disco era toda una leyenda, su protagonista era un sujeto llamado David Sutch, admirador de "Screamin'" Jay Hawkins (él se hacía llamar "Screamin' Lord Sutch) y Little Richard , fue uno de los primeros rockers que uso el pelo largo, se vestía en forma estrafalaria (como podrá verse en la portada del disco) y hacía de sus presentaciones verdaderos "performances" con ataúdes y otros efectos necrófilos.

En el disco que estamos comentando, toda esa parafernalia no se podía apreciar, pero en la portada del álbum se anunciaba al Lord Lamentoso que nadie sabia quién era, ni de dónde lo habían sacado y sus Amigos los Pesados y hay que recordar que en esos años "pesado" tenía una connotación rebelde, iconoclasta, escandalosa, irrespetuosa, no complaciente, no comercial, anegrado y todo lo similar que a usted se le ocurra, resultando que los cuates pesados del Noble Gritón, anunciados en la misma cubierta eran: Jimmy Page, John Bonham, Jeff Beck, Noel Redding y Nicky Hopkins; y en su disco de 1972, estaban también: Keith Moon, Ritchie Blackmore, Matthew Fisher (sí, el que tocaba el órgano en Procol Harum) y Víctor Brox (pionero del blues inglés y parte del repertorio del primer "Jesus Christ Superstar").

No sé como le hacía el Lord "pirata" para tener esos cuates ni como los convenció para que tocaran en su disco, pero lo que es innegable, es que era la mayor reunión de rockstars que se había visto, no recuerdo si en esos años mozos escuché el disco, lo que es muy probable, porque lo editaron en México, pero si así fue, ya no me acordaba de que iba.

Con el tiempo leí y escuché opiniones y reseñas acerca de él y la mayoría coincidian en que era un disco de regular para abajo, desde el punto de vista musical, pero que era un hito histórico y pieza de coleccionistas por la tumultuosa y famosa compañía de Sutch, estos comentarios, despertaban mi curiosidad pero, no había podido conseguir el disco ni prestado, hoy encontré a alguien que me lo prestó y aquí va mi opinión.

La mayoría de las composiciones aparecen firmadas por Sutch y Jimmy Page, en algunas colaboran otros de los invitados y ninguna es un portento, ni de inventiva, ni de creatividad, no hay experimentos de ningún tipo, es simple y llanamente un disco de Rock 'n' Roll, un divertimiento rocanrolero entre amigos en el que por supuesto destaca, la calidad interpretativa y conocimiento que los invitados a la fiesta tienen del género que escogieron para ganarse la vida, allí están los riffs y solos de guitarra de Page y Beck, el piano de Hopkins, el bajo de Redding y las percusiones inmensas de Bonham.

Lista de canciones.

  1. "Wailing Sounds" (Page/Sutch)– 2:38
  2. "'Cause I Love You" (Bonham/Edwards/Page/Sutch) – 2:46
  3. "Flashing Lights" (Page/Sutch) – 3:14
  4. "Gutty Guitar" (Sutch) – 2:33
  5. "Would You Believe" (Cee) - 3:20
  6. "Smoke and Fire" (Sutch) - 2:38
  7. "Thumping Beat" (Page/Sutch) – 3:07
  8. "Union Jack Car" (Page/Sutch) – 3:03
  9. "One for You, Baby" (Sutch) – 2:44
  10. "L-O-N-D-O-N" (Sutch) – 2:56
  11. "Brightest Light" (Cee/Sutch) - 3:57
  12. "Baby, Come Back" (Page/Sutch) - 2:31

Aquí se descarga el disco.














viernes, 19 de noviembre de 2010

EL DEBUT DE QUICKSILVER. LOS DISCOS DE 1968.


 

QUICKSILVER MESSENGER SERVICE.
Quicksilver Messenger Service
1968.





Estos mensajeros del flower power, del mundo nuevo y del amor son una de las bandas más originales de toda la historia del rock, formada por músicos folk que fueron desplazando el espectro musical hacia la sicodelia y el llamado rock ácido, producto de su asentamiento en la mítica Frisco de fines de los sesentas.

El mencionado periplo de un género a otros, la mentalidad colectiva que se sintetizaba en la palabra "búsqueda" y la apertura y actitud de los oyentes hacia toda propuesta musical nueva que tuviera el sello "juvenil" (en el jazz había mucha inovación sin la audiencia masiva del rock) se concatenaron para que John Cipollina en guitarra; David Freiberg guitarra, bajo y viola; Greg Elmore en los tambores y Gary Duncan guitarra y voz, produjeran este sonido que aún dentro del rock ácido y en comparación con otras bandas del género sonaran inimitablememnte.





Este es su disco debut, uno de esos debuts por demás afortunados, como muchos otros en el rock, con músicos creadores de sonoridades nuevas, mucho empuje, inspiración y fé en lo que estaban haciendo y en el caso del rock de estas épocas se consideraba algo en verdad trascendental, mucho más allá de ganarse un buen varo. Desde "Pride of Man", la canción de inicio, el escucha sabe que está ante algo especial, los coros, las formas de cerrar cada estrofa, la utilización de las guitarras (en el Quick rasgo característico) le avisan que no va a escuchar más de lo mismo.

Y para que el goce vaya en aumento, se liga con "Light your mirrors", fina pieza de orfebrería musical con las guitarras otra vez resaltando inmensamente, ambas piezas de inicio preparan la entrada de "Dino´s Song", bella balada de esas simples pero que no les falta nada para conquistar al oído y luego un rolón inconmensurable que se llama "Gold and Silver", haciendo honor al nombre, más orfebrería en metales preciosos, esta vez en una pieza instrumental que devela todos los secretos del sonido Quick en lo que concierne al uso de las guitarras.

Y el cierre que mantiene la tensión placentera, la fuerza combinada con la delicadeza en dos piezas, la primera, otra balada muy roquera al estilo de la canción de Dino y la larguísima "The Fool", otra lección de como hacer piezas largas, al estilo del jazz, sin ser aburridos, sin cansar y al contrario, generar el deseo en el auditorio de que jamás termine. 


martes, 16 de noviembre de 2010

sábado, 13 de noviembre de 2010

RESEÑA. Concierto de Massive Attack.


MASSIVE ATTACK EN EL METROPOLITAN.




El miércoles 10 del presente, acudí al Teatro Metropólitan, uno de los bastiones de OCESA, la empresa que en las últimas décadas ha traído a México una gran cantidad de muy buenos conciertos, llegué dos horas antes porque no me gusta manejar cuando ya cayó la noche y porque siempre estoy pensando que voy a encontrar una cantidad de tránsito infranqueable.

Mientras esperaba a mi acompañante e invitadora me entretuve observando al ejército de revendedores de boletos que pululaban por todo el frente del teatro, ante la complacencia de un nutrido grupo de policías que no escuchaban a estos "trabajadores ilegales" repetir la misma cantaleta ad infinitum "¿te sobran o te faltan? te los compro y te los vendo" y les resultaba imposible identificarlos de tan bien camuflados que estaban (gritaban a voz en cuello :¡boletos, boletos! ¿cuántos quieres?), escena natural y cotidiana en estas tierras invadidas hasta el cuello por la más escandalosa corrupción que nación alguna haya padecido.

Cerca de las nueve de la noche hizo su aparición mi acompañante, experta en hacerme esperar, parece que disfruta pensando que me tiene dando vueltas y vueltas como Chuck Berry en su célebre canción, atacado por la impaciencia, pero incapaz de devolverle una y harto después de escuchar por lo menos 50 veces la inquisición de los representantes del "mal necesario" llamado reventa, entramos al recinto musical, ella no sé, pero yo, con la expectativa de escuchar a esta banda que ahora sé que es de Bristol, Inglaterra, pero que jamás había escuchado a pesar de que hace 22 años están en actividad (también me acabo de enterar de esto), y tan sólo con la promesa: "Te va a gustar".

Cuando entramos ya estaba cantando una chava, solita con un tecladito, una cajita de ritmos y una guitarra, nada mal para empezar a calentar el concierto, después veriamos que era una de la invitadas de la banda para este concierto y para algunos discos y pocos minutos después salió al escenario Massive Attack y todo el público se puso de pie, para no volver a sentarse hasta que la audición terminó, mientras yo me hacía la pregunta pendeja que me hago cada vez que estoy en esta situación ¿para qué diablos pagan un asiento si no lo van a utilizar? y si algún desorientado como su servidor quiere disfrutar el espectáculo desde la comodidad de su asiento, ¡ya se chingó! y más aún si uno tiene la desgracia de ser minusválido, de capacidades diferentes o algún otro eufemismo utilizado para lo que en mi infancia era un inválido y no puede estar de pie, ¡ya se chingó doblemente!, por lo menos yo tengo el consuelo de pararme a ratos.

Pero es hora de pasar a lo estrictamente musical y resulta que la desconocida banda (para mí), tiene un sonido poderoso muy cargado a la música electrónica, con unas percusiones protagónicas, polirítmicas y contundentes (literalmente), haciendo una mezcla de la ya mencionada tecno, más unos toques de jazz, ciertos momentos raperos, una influencia jamaiquina fuerte que importa Horace Andy, de quien se dice es toda una leyenda en su nativa Jamaica y quien es otro de los vocalistas invitados y una vena soulera que me resultó muy placentera y que protagonizaba Deborah Miller, una morenaza muy heavy en cualquier sentido que elijas y con una voz muy poderosa, otra vocalista invitada.

A la mitad del concierto y con tantos vocalistas, me sentía como en tocada de la Sonora Santanera, escuchando a una banda numerosa que además tiene catálogo de vocalistas que va utilizando según la rola que se interpreta y por si fuera poco el maestro Andy tiene un aire de Carlos Colorado impresionante y baila como la leyenda santanera.

Resumiendo, el encuentro con esta banda a la que según me enteré le adjudican la etiqueta de inventores del trip hop (sea lo que sea esto), pero que ellos rechazan, fue una experiencia placentera e inédita, tantos estilos ensamblados tan bien y vestidos de un ambiente oscuro que me hizo recordar un memorable concierto en este mismo recinto con la "jefa" Lisa Gerrard y los Dead Can Dance o los discos de Portishead, fue reconfortante, energizante y actualizante, ¿a quién se le ocurre hacer música dark que también suene a otra media docena de géneros o estilos? dicen que a un tal Garnt Marshall, alias Daddy G y quien es el líder del Ataque Masivo.

Y por último, hay que hacer mención especial a la escenografía y luces, muy original y económica, una especie de tablero electrónico proyectado atrás del grupo con juegos de luces, letreros, imágenes, potenciado por una buena dirección de luces escénicas encajaban perfectamente con el sonido tecno-industrisl-vanguardista de la banda.


miércoles, 10 de noviembre de 2010

GRANDES GUITARRISTAS. Mick Ronson.


MICK RONSON.
1946-1993.




La revista Rolling Stone colocó a Mick Ronson en el lugar 64 de su polémica lista de los 100 mejores guitarristas del rock de todos los tiempos, para quienes lo hemos escuchado por décadas y peleado por un reconocimiento mayor no estamos de acuerdo con este lugar, pero haiga sido, como haiga sido, el hecho de que esté entre los 100 mejores de la historia, entre varios miles, habla de su calidad.

Se hizo famoso como guitarrista, pero tocaba varios instrumentos, el más notable después de la guitarra fue el teclado de cualquier tipo, pero además cantaba, componía canciones, hizo labores de arreglista y de productor, todos los terrenos de la industria roquera del disco los pisó y conoció a fondo.



Tocó con muchos de los más conspicuos músicos de la escena del rock, Dylan, Van Morrison, Lou Reed, Morrisey, son algunos, pero su trabajo sobresaliente, el que lo hizo famoso e inmortal fue su pertenencia a la banda de David Bowie, con la que grabó media docena de discos, todos geniales, todos clásicos y en ellos Ronson no era un complemento o acompañante intrascendente, sino todo lo contrario, fue siempre contributente mayor al sonido que en cada placa develaba el camaleón.

Ronson siempre estuvo a la altura del genio de Bowie y lo complementó con el propio, por eso hoy lo recordamos recomendando el video que se llama "Ziggy Stardust and the Spiders of Mars" de Motion Picture y que contiene la gira de Bowie, Ronson y compañía para presentar el disco más célebre de los que hicieron juntos en él también se puede ver la que tal vez sea su mejor actuación, pero de no ser así, es un escaparate perfecto para ver de que lugar tenía Ronson entre los grandes de la guitarra.











viernes, 5 de noviembre de 2010