lunes, 10 de septiembre de 2012

Los Discos de 1970. Free.



FREE
"Fire and Water"
1970



Free es uno de esos arietes que con la fuerza del hard rock, rompieron barreras y llegaron a revitalizar el rock a su manera, en medio de la orgía hippie y progresiva, llena de excesos y preciosismos, que revelaban a los grandes virtuosos de los instrumentos, a los míticos vocalistas de maravillosas voces y a los complicados compositores de suites seudo cultas, suplieron sus limitaciones académicas y natas, con fuerza, vitalidad y energía.

Paul Rodgers estaba muy lejos de ser un cantante exquisito de voz equilibrada y perfectamente controlada, pero suplía sus deficiencias con montañas de emoción y una gran habilidad para regular sus registros muy cortos, y sonaba extraordinario, un caso de esos de "tengo poco pero lo administro inigualablemente", después de él, sólo Chris Robinson de The Black  Crowes, me ha dado esa sensación de que son, incluso mejores que los "mejores científicamente comprobados".

También estaba Andy Fraser, el que hacía mancuerna con Rodgers en la composición y usaba el bajo como un incansable productor de sonido que hipnotizaba, complementándose con Simon Kirk, un baterista que producía un ruido infernal en forma de explosiones o descargas de estridencia y para completar, el guitarrista Paul Kossoff, otro caso de artista limitado en sus capacidades ejecutivas, pero sobrado de energía, emoción y empuje.

La combinación de estos elementos, dio a luz uno de los ejemplos más representativos del hard rock británico y en especial del hard londinense, conviviendo con propuestas cercanas pero únicas como la de Ten Years After o la de Bolan y su T Rex, develaron uno de los momentos más emotivos y esperanzadores del rock en el Reino Unido, una especie de reivindicación de las virtudes primitivas del género, un regreso a los tiempos románticos en que el rock era pura fuerza, emoción y rebeldía.

"Fire and Water" que ya era su tercer disco, se volvió un clásico casi instantáneo, abriéndose paso con "All Right Now", con un riff de esos memorables y una fuerza fresca y demoledora, fue un exitazo que permitió a escuchas y críticos poner la debida atención a todo el disco, que tiene joyas como "Mr. Big" y "Don´t Say Your Love me", con grandes dosis de Blues en el panorama hard que domina al disco y en donde Rodgers, demuestra su valía.






1 comentario:

Víctor Hugo dijo...

Pues mira que me encanta el Hard-Rock de los 70 con raíces Blues, pero a parte de las cancioens más conocidas suyas, nunca he profundizado en esta pedazo de banda, un fallo que intentaré solucionar pronto:)

¡Saludos!