Hay momentos en la vida en que las cosas no pintan nada bien. En estos casos se tienen muchas opciones: ponerse a tomar hasta perder el conocimiento, recurrir a los buenos amigos, o simplemente, dejarse llevar por la depresión y quedarse inmovil esperando a que lo peor pase. Este jueves decidí terapearme lanzándome solo al concierto de la banda de Londres, Inglaterra, Hot Chip.
Hot Chip es una banda que viene haciendo música "electro-pop" desde el 2000 y ha editado tres álbumes de estudio, Coming on Strong (2004), The Warning (2006) y Made in the Dark (2008). Además, tienen varios Ep's y una cantidad bastante amplia de remixes. La banda, que por cierto, tiene más la pinta de un grupo de nerds que de rockstars, está lidereada por Alexis Taylor y Joe Goddar, ambos comparten las vocales, además de otros instrumentos.
No gastaré mucho espacio describiendo las calamidades que ya se estan volviendo clásicas en los eventos de este tipo en la ciudad: horas para conseguir un par de tragos (gratis, eso sí), juniors infames que van a todo, menos a escuchar música, los precios poco accesibles para quienes pertenecemos a la clase media y la poca calidad del grupo abridor Disco Ruido. Mejor es escribir algo sobre la gran actuación de Hot Chip.
Hot Chip es una de esas bandas cuyo sonido cambia en sus presentaciones en vivo. Desde el inicio, con la gran rola One Pure Thought, estos nerds pusieron a bailar al respetable con sus beats salidos de sus teclados y sintetizadores, las guitarras y percusiones tampoco se dieron a desear. Estirando los beats más bailables entre rola y rola, el chip caliente provoco que el que aqui escribe no dejara de mover los pies, con versiones diferentes de sus grandes hits Boy From School y Over and Over. Entre rola y rola, Taylor y compañía agradecían y saludaban al público en español (algo que en México siempre celebramos de sobremanera). Taylor parece ser un tipo demasiado tímido, su voz, en ocasiones suave y en otras potente cerraba el círculo de la excelente música que estaban produciendo estos cuates, a diferencia de Goddar, quien se dió la oportunidad de aventarse un pequeño rap (de verdad que parecen cualuqier cosa menos rockstars). Juntos, logran poner el cuero de gallina a cualquiera cuando combinan sus suaves voces durante los coros de ciertas rolas. La emoción crecía con piezas como Ready for the floor, Out at the pictures y la genial Hold on. El alcohol no paraba de correr, las drogas ilegales y las restringidas hicieron su aparición. El ambiente cambió en la última parte del concierto, cuando la banda presentó una nueva rola, más tranquilona, para lluego dar paso a temas más lentos, baladas electrónicas ifluidas por el blues, el dub, y sì, más electropop. El colofon de la noche fue la emotiva versión de la rola de Prince (y popularizada por Sinead O Connor), Nothinn compares 2 you. En resumen una gran noche, y una super fiesta.
Y la terapia funcionó realmente, querido lector, reafirmando una vez más lo que sólo la música es capaz de hacer: lograr momentos de verdadera felicidad.
Epílogo. La noche fue creciendo anímicamente para este servidor, y concluyó de una forma que no podría ser mejor. Sólo hay una cosa que puede levantar más el ánimo que un gran concierto: una llamada anónima y una dulce voz deseandote une bonne nuit. Gracias stranger.