miércoles, 11 de julio de 2012

Los Discos de 1970. Nick Drake.




NICK DRAKE
"Bryter Layter"
1970




Para seguir con los trovadores solitarios, cantautores o cantantes de folk-rock, muy en boga por los años setenteros, aquí está un caso muy especial, un misterio sin resolver, el extraño e insólito caso de Nick Drake, su obra, su personalidad, su ignorada carrera musical y su consagración post mortem, hasta convertirse en la actualidad en un artista de culto, un músico reconocido por críticos e historiadores, pero que casi nadie ha escuchado, porque a pesar de todo, los tres discos que grabó, nunca se han vendido masivamente.

Nick nació en Birmania por azares del destino, pues su padre quien era ingeniero había llevado a la familia a vivir en ese exótico país, donde estaba la compañía en la que trabajaba, a los cuatro años  de edad de Nicholas Rodney, su nombre oficial, la familia regresó al Reino Unido y se instalaron en un poblado cerca de Oxford, las biografías de Drake acotan que, ambos progenitores de Nick, eran gente culta, amantes de la música y las artes en general y que procuraron los mejores colegios a su alcance para sus hijos.

A muy temprana edad, aprendió a a tocar: piano, guitarra, clarinete y sax y en la adolescencia empezó a componer canciones, ya permeadas desde entonces por su personalidad retraída, introvertida y dada a la depresión, estudió literatura inglesa en la Universidad de Cambridge, pero antes de terminar la carrera, la abandonó y se fue a Londres para dedicarse de lleno a la música, allí conoció al productor de la banda de folk-rock Fairport Convention, quien produjo su primer disco, mismo que no conozco, pero que según las reseñas, era de gran calidad, con Nick tocando su guitarra de forma sobresaliente, cantando con esa voz triste y emotiva a la vez y contando sus historias poéticas, con un mínimo de instrumentos.

El disco tuvo ventas muy bajas y la crítica se dividió entre quienes lo consideraron el disco sobresaliente de un músico prometedor y los que dijeron que tenía buenas letras, pero era muy aburrido, corría el año de 1968 y Drake contaba con veinte años, al parecer Nick creía mucho en sí mismo y no esperaba que su debut discográfico fuera tan ignorado, pero a la vez, rehuía a la promoción con presentaciones en vivo, las que son descritas por quienes las presenciaron así: Nick sentado con la vista clavada en el piso, sin dirigirse al público ni para presentar las canciones y mostrando una mezcla de inseguridad y retraimiento extremo.

En 1969 regresó a Londres, abandonando otra vez los estudios con el disgusto de su padre, para intentarlo otra vez, presentó varias canciones a Boyd, su productor, y éste que creía en el talento de Nick, decidió hacer una producción con arreglos más complejos, variedad instrumental y las excelentes canciones de Drake, el álbum quedó listo al año siguiente, con la participación de algunos de los fairport y de John Cale, además de una dotación instrumental que incluía, además de guitarra acústica y piano, bajo y guitarra eléctricos, flauta, sax, viola y harspicordio (tocados por Cale), celeste y órgano.

En "Bryter...están algunas de las mejores canciones de Nick la bella "Northern Sky", por ejemplo, una canción de amor como pocas veces se han escrito; "One of These Things First" o "Fly", melancólica y desesperada, un aspecto novedoso en los discos de rock que tenía el álbum es una introducción, un intermedio y una coda instrumentales, enmarcando uno de los discos más tristes y más bellos de la historia, porque finalmente, la tristeza es la forma más acabada de la belleza.  

Estos arreglos y nueva instrumentación, ampliaron el característico folk-rock de Drake, con exactos y notables aires de Jazz, pero una vez más, el álbum "Bryter Layter" que era una joya de composición, arreglos y ejecución, vendió pocas copias y tuvo peor acogida de la crítica, hechos que sumieron a Nick en estados depresivos más alarmantes que lo normal, su padre ya no le ayudaba económicamente y sólo vivía de las regalía de la disquera, se volvió más introvertido y se sospecha que tomaba drogas con asuidad y ese hecho agravaba su inestable equilibrio síquico, todavía en 1972 hizo un tercer intento discográfico, el llamado "Pink Moon", sin más que su voz y su guitarra y por supuesto pasó desapercibido.

Para 1974, Nick, había vuelto a casa de sus padres, había estado hospitalizado por una crisis nerviosa y sufría depresión casi todo el tiempo, razón por la que tenía que tomar antidepresivos, el día 25 de Noviembre de ese año, su madre lo encontró en su cuarto, muerto por sobredosis de medicamentos, nunca quedó aclarado si la ingesta excesiva fue un accidente o un acto suicida y sólo una década después, Nick Drake empezó a ser redescubierto, con músicos jóvenes que se declaraban sus "fans" dispuestos a reivindicarlo, canciones dedicadas a él y hasta libros sobre su vida y obra.

"Bryter Layyter" no fue un álbum notable en 1970, de hecho pocos se enteraron de que había salido a la venta, pero con el tiempo se ha vuelto una obra reiteradamente señalada como maestra, un álbum de culto y la reivindicación tan esperada y nunca presenciada por el extraño Nick, el poeta que murió a los 26 años, después de vivir una vida atormentada, incomprendida y paradógicamente luminosa, varias décadas después, Elliott Smith, nos haría recordar la vida la obra y la muerte de Nick, con una semejanza asombrosa.






















1 comentario:

Juanjo Mestre dijo...

Es un disco precioso, creo que me gusta incluso más que el aclamado "Pink moon". Saludos.