Hace algunos días fui al concierto del músico, compositor y cantante francés Sébastien Tellier. Este cuate editó este año el álbum Sexuality, de la mano de la mitad de Daft Punk, Guy-Manuel de Homem-Christo. Sexuality (el nombre lo dice todo), es un tributo a la sexualidad y al erotismo; un compendio de finas baladas electrónicas aderezadas ocasionalmente por el piano y la guitarra del galo. Con un sonido retro, Tellier es la perfecta encarnación de un rockstar francés de antaño y sus cachondas melodías incitan al romance y al desenfreno.
Tellier, un treintañero barrigón y medio calvo, ofreció un buen show aquel viernes por la noche, y digo, show. Es divertidísimo mirar a Tellier interpretar de una manera tan dramática, casi actuando cada una de sus rolas y jugando diferentes papeles: encendiendo un cigarro, tocando el piano con una intensidad envidiable, moviendo su gorda figura de manera sensual (con sus eternos lentes obscuros), o empinándose una botella hasta vaciarla.
La música, sin embargo, dejó algo que desear. La escasa duración del concierto logró que las improvisaciones de Tellier y su banda resultaran eternas al agregar muy pocos hits al repertorio. Lo que pintaba para ser una experiencia orgásmica, terminó siendo un evento precoz y no tan placentero. Lastima.
Definitivamente, el concierto no le hizo justicia a Tellier, quien es un gran músico y cantante. Realmente vale la pena echarle una oreja a este francés. Aquí el video de una de las más intensas de la noche, L'amour et la voilence, también una de las rolas más sensible, intensa y cachonda del Sexuality. Disfrute.
1 comentario:
No había podido escuchar el video, mi máquina de pronto no los corre, me pareció una propuesta muy interesante, voy a seguir a este gordito.
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