DANIEL JOHNSTON.
Sigue la generosa respuesta de nuestros lectores que nos envían sus artículos y la mayor fortuna del blog es que todo lo que nos han mandado tiene excelente calidad, es este el caso de Lalo, que forma parte del equipo que hace el blog que se llama NEU! 75, y se especializa en música, específicamente en el rock, pero si piensan que el susodicho es un blog roquero más, siento mucho desilusionarlos, NEU es un blog que busca temas poco sabidos, está bien informado y bien escrito, lo que es una bendición en un medio en el que abundan los blogs malhechos y malescritos.
Daniel Johnston es una de esas personas a las que se les regaló un talento innato y una vida de sufrimiento. Ésta es un poco de su historia:
Un chico común de Texas en la etapa de la adolescencia empieza a retraerse, al grado de convertirse en un ser inseguro e introspectivo, sensible como nadie; comienza a refugiarse en sus videos caseros, sus comics, sus dibujos, los Beatles y las canciones que este amor y amargura le hacen escribir. No es casualidad que su primer cassette lo titulara “Songs of Pain”. Se enamoró terriblemente de su amiga Laurie, como es de esperarse, ella un chica linda y él un freak inseguro, no le hizo caso, otro motivo para la inspiración musical.
Una guitarra, un piano o simplemente su voz en una grabadora barata, fue lo único que necesitó Daniel para crear canciones realmente emotivas, llenas de sentimiento. Así siguió haciendo sus propios cassettes, de los cuales dibujaba las portadas, hasta que algunos músicos descubrieron que este chico tenía talento e interesados en él ayudaron a pulir su sonido con mejores producciones, pero lo más importante de todo, lo esencial en la música, siguió haciendo grandes canciones.
Atormentado por su miedos, especialmente al Diablo, una vez, nada más, aventó las llaves de la avioneta que iba manejando su padre, salieron vivos de milagro pero aquello lo llevó a ser recluido en un hospital psiquiátrico.
Hoy a sus 51 años aún vive con sus padres. Sigue ensayando y componiendo en el mismo cuarto donde una vez de joven, casi niño, escribió sus primeras canciones. Podría decirse que la enseñanza de alguien como Daniel Johnston es que no se necesita una gran producción para hacer buenas canciones, las buenas canciones los son, simplemente; y no es necesario desear ser famoso, si se hace de corazón no hay nada más que pedir.
The Devil and Daniel Johnston es el documental de la vida de este artista (que por cierto no he encontrado en México). Muy recomendable. Aquí el trailer con una gran canción: True Love Will Find You In The End.
Un chico común de Texas en la etapa de la adolescencia empieza a retraerse, al grado de convertirse en un ser inseguro e introspectivo, sensible como nadie; comienza a refugiarse en sus videos caseros, sus comics, sus dibujos, los Beatles y las canciones que este amor y amargura le hacen escribir. No es casualidad que su primer cassette lo titulara “Songs of Pain”. Se enamoró terriblemente de su amiga Laurie, como es de esperarse, ella un chica linda y él un freak inseguro, no le hizo caso, otro motivo para la inspiración musical.
Una guitarra, un piano o simplemente su voz en una grabadora barata, fue lo único que necesitó Daniel para crear canciones realmente emotivas, llenas de sentimiento. Así siguió haciendo sus propios cassettes, de los cuales dibujaba las portadas, hasta que algunos músicos descubrieron que este chico tenía talento e interesados en él ayudaron a pulir su sonido con mejores producciones, pero lo más importante de todo, lo esencial en la música, siguió haciendo grandes canciones.
Atormentado por su miedos, especialmente al Diablo, una vez, nada más, aventó las llaves de la avioneta que iba manejando su padre, salieron vivos de milagro pero aquello lo llevó a ser recluido en un hospital psiquiátrico.
Hoy a sus 51 años aún vive con sus padres. Sigue ensayando y componiendo en el mismo cuarto donde una vez de joven, casi niño, escribió sus primeras canciones. Podría decirse que la enseñanza de alguien como Daniel Johnston es que no se necesita una gran producción para hacer buenas canciones, las buenas canciones los son, simplemente; y no es necesario desear ser famoso, si se hace de corazón no hay nada más que pedir.
The Devil and Daniel Johnston es el documental de la vida de este artista (que por cierto no he encontrado en México). Muy recomendable. Aquí el trailer con una gran canción: True Love Will Find You In The End.
2 comentarios:
Esta historia que no conocía, me recuerda mucho a la de Elliott Smith, quien desgraciadamente termino de hacer hermosas canciones porque se metió un balazo en la cabeza.
clerto, son dos historias parecidas que cargaron con la depresión.
Gracias por la intro.
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